martes, 4 de septiembre de 2012

Una cabaña con palmeras no es un chiringuito.

Un aperitivo maravilloso en Santa Chiara (Génova) / MIXURO


Lo primero que me viene a la mente con la palabra chiringuito es una imagen de Georgie Dann cantando esa canción que seguro que ya tienes rondándote la cabeza. Lo siento, la vas a estar cantando todo el día. 
Lo siguiente que me viene a la mente son montones de tardes de verano en la playa, cuando el viento empieza a amainar, el agua del mar parece tibia y el sol se esconde entre los más preciosos azules.
En principio la idea de poderte tomar una copa en una hamaca mientras hundes los dedillos de los pies en la arena me resulta maravillosa, pero no a cualquier precio. 

Tardes relajadas en el chiringuito de la Playa del Dosel de Cullera / MIXURO

Demasiadas veces nos hemos encontrado con chiringuitos que son meras cabañas prefabricadas adaptadas a lo que en nuestro subconsciente debemos tener clasificado como tal: caseta de madera, hexagonal, con tejado de "pizarra sintética" y glamuroso pavimento de madera. Añadamos una palmeras de plástico verde fosforescente, un enorme cartel con el nombre del local y por qué no, un Moái... Es muy importante, que el almacén quede a la vista de todo el mundo (al ser hexagonal, da igual donde amontones los barriles y las cajas porque se va a ver igual)
 
Chiringuito en la playa de Los Olivos en Cullera, con sus palmeritas de plástico y su almacén "invisible" / MIXURO

Y es que a los chiringuitos les acaba pasando como a las cabañas de madera (son del mismo fabricante) que de tan desmontables y tan "nada" que quieren ser terminan por no tener nada que ver con el lugar donde se dejan caer y de donde desaparecen, sin dejar rastro, con los primeros fríos.

El chiringuito de la Playa del Dosel se adapta con cierto cariño a los vientos y las subidas del mar. Los pequeños gestos se agradecen / MIXURO

Será mucho pedir un poquitín de preocupación por el paisaje, esas dunas tan mimadas, tan preciosas, ¿no se merecen un poco más de respeto? ese mar tan generoso, esas cañas ¿qué pinta aquí esa cabaña?

En fin, creo que el chiringuito es un maravilloso elemento a estudiar y resolver como parte del entorno en el que se debe integrar. Un chiringuito podría ayudar a las dunas, aprovechar mejor el viento y el sol, pensaremos en ello.

Este local al oeste de Génova parece más auténtico que la playa donde está. / MIXURO


Tal vez observando en otros lugares podemos intuir las claves que deberían guiar el diseño de estos elementos del paisaje.
 

 Santa Chiara, también en Génova, es como un barco suspendido sobre el mar. Para acceder dependes del humor del mar,  pero merece la pena. / MIXURO

Si miramos con detenimiento construcciones que se han ido adaptando a las condiciones de su entorno, la orientación, los vientos, las mareas, etc. adoptando formas, texturas y colores a veces sorprendentes. El resultado es siempre mágico.

Una estructura muy sutil para apoyarse en el imponente acantilado de la costa ligure / MIXURO
 

2 comentarios:

  1. ueeeeeee
    benvinguts després de l'estiu
    s'agraeix
    bona entrada i a més sense exemples "chill out" eivissencs i formenterescs (gracies, us estime)

    pd:

    inevitable demanar una entrada sobre:

    "la bar ba co aaa..."

    XD

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  2. Aquesta setmana al meu blog de cuina
    http://fareres.blogspot.com.es/
    tenim alguna coseta de barbacoa... i altres.
    Moltes gràcies Alfred, te trobàbem a faltar.

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