martes, 22 de enero de 2013

Una reflexión

Extraño fenómeno de luz producido sobre las Torres de Quart. / MIXURO
Llevo varios días viendo estos dibujos de luz sobre las Torres de Quart. A la misma hora de la mañana, según rodeo las torres para encarar la última recta, el último esfuerzo antes de llegar al colegio para dejar a los niños. Cargado como voy en la bici (a saber: casi 25kg de niño, con su mochila que incluye estuche de dos pisos, deberes terminados, almuerzo, botellita de agua, ropa + toalla de gimnasia y en la cesta delantera  mis cosas: cámara de fotos, estuche con lápices y un "tupper" con la comida del día).


Y digo que encarando la última recta, para llegar a la primera meta del día, me encuentro con estas misteriosas manchas de luz. Mi primera impresión es que son una representación de los 24 46 cromosomas de un homo sapiens sapiens, tal como recuerdo que los aprendíamos en la escuela, en la clase de ciencias naturales. Los cromosomas contienen el ADN, contienen toda la información, en forma de genes, necesaria para que se pueda desarrollar un ser humano, es decir tú y yo.

Mapa genético de una niña. / Creative Commons License
Entonces, alguien ha proyectado una imagen de la "caja" (o cajas) que contiene los planos y las instrucciones de montaje de mi propio cuerpo (podría ser del tuyo o del de cualquier otro, pero me permito pensar que es del mío). Me gusta.
Sin embargo, mientras espero a que el semáforo corte el tráfico en Guillem de Castro (para no resultar embestido por los vehículos que circulan a toda velocidad), me doy cuenta de que esas manchas son producidas por el reflejo del sol sobre unas ventanas de un edificio que hay en frente. Después de un minuto por fin cierro la boca.

¿Has pasado por aquí a estas horas de la mañana? / MIXURO
¿Cómo es posible? Bueno, claro que es posible, después de un breve viaje de unos ocho minutos desde el sol a través del espacio, sin encontrar ningún obstáculo (nubes incluidas) un grupo de fotones se las ha arreglado para rebotar en el vidrio de la ventana, seguidamente chocar contra el muro de las torres y finalmente llegar hasta mi retina. Esas clases de ciencias, ¡qué bien aprovechadas!
Pero, ¡espera! Si esto fuera siempre así la ciudad estaría llena de estas manchas u otras similares, ¿no? Pero no es así, o al menos yo no las he visto. Entonces, ¿qué es lo que pasa? ¿Es que las leyes de la física no rigen igual en todos los sitios? ¿Estamos ante una singularidad en el espacio-tiempo? ¿Son las Torres de Quart un agujero negro? No te agobies Javier, me digo.

Este es el edificio en cuestión, que por cierto, en algún momento debieron realizar reparaciones en la fachada y se han quedado dos tonos diferentes de amarillo-ocre. / MIXURO
Está claro que la respuesta a todas estas preguntas es no. ¿Dónde está el truco? Pues la respuesta está en las persianas, o en la ausencia de las mismas. Quien dice persianas dice toldos, contraventanas, etc. que impiden la reflexión de la luz del sol sobre los vidrios de las ventanas.
Y es aquí donde se produce mi reflexión (¡hoy lo bordo!): Si éste es un ejemplo singular, es decir que no sucede con frecuencia por la ciudad, ahora que es invierno, es porque la mayor parte de los fotones que iniciaron su viaje con la esperanza de entrar en nuestras casas, en nuestros colegios, en nuestros lugares de trabajo, se encuentran con un toldo, una contraventana o una persiana. No les dejamos entrar a iluminarnos, a calentarnos.
Reflexiona un poco, en un día soleado, en una vivienda bien orientada podemos conseguir aumentar la temperatura ambiente unos 10ºC sólo con abrir las persianas (experimentado en mi casa). ¡No está mal!
Y si este argumento no te convence para dejar esas persianas abiertas durante los meses de frío pues piensa en ese pobre fotón, que con tanta ilusión ha venido hasta tu casa y no a otra... él nunca te cerraría la puerta... déjale entrar.


8 comentarios:

  1. ¡Bravo! Muy bien pensado. Yo, si hubiera visto este fenómeno, me habría quedado en el encantador efecto que produce, pero jamás habría hecho la reflexión sobre el aprovechamiento del calor de la luz solar.

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    1. Gracias Carlos, a mi siempre me ha llamado la atención la cantidad de ventanas con sus persianas cerradas que hay por la ciudad. ¿Son todas viviendas vacías? No lo creo...

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    2. Es dificil que a la gente le entre eso en la cabeza, incluso con una cortinita de esas de visillo para que no se les decolore el sofá, la habitación se calienta igual (o casi, casi).

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    3. Claro, eso puede tener sentido según la manera de vivir de hace algunos años. Pero hoy en día con mobiliario tipo Ikea (que no es para toda la vida) y con las tarifas de electricidad o gas por las nubes ya no se sostiene.
      Gracias!

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  2. javi ens convida a obrir les persianes i que entre la llum a casa. Identificar les coses senzilles de vegades arriba per camins complicats, us sona arquitectes? :)
    bella pàgina

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  3. Gracias Alfred, creo que viene del "aprovechar cosas gratis" que nos invade últimamente el pensamiento.

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  4. Jolin Javier! le has dado una intriga a la cosa que al final me he creído lo del agujero negro! estupenda reflexión mañanera! un abrazo! Mar

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    1. Un frasquito de intriga al día es de lo más estimulante, ¡me alegro de que lo hayas disfrutado! Gracias!

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